Sentencia (Ensayo de
un juicio) de Luz María Meza
Luz María Meza nos presenta una
historia que podría pasar por sesentera, para aquellos que vivimos en esa época
nos recordó una telenovela pero sin anuncios y podría pasar en blanco y negro.
Una mujer madura, exitosa, sin
hijos, una mujer joven con el mismo nombre de la mujer madura, que empieza su
vida amorosa así como profesional y un hombre maduro, hipertenso, enamorado; un
triángulo amoroso donde por un lado una de ellas sigue recibiendo todo el apoyo
y por otro lado la mujer joven también teniendo una relación amorosa, los tres
licenciados, dos de ellas trabajan en el mismo despacho el otro aparentemente
está apoyándolas en un caso hasta que algo ocurre empezando por un papel que
desaparece muy importante para el caso.
Una entretejida trama, divertida
con la cual nos podemos sentir identificados, con una terrible violencia por
parte de una de las mujeres, quién dice que solo el hombre agrede, un melodrama
de corte policiaco, donde poco a poco se empieza a descubrir lo que realmente
ocurre, hay tres sospechosos, tres culpables y hasta un crimen.
Con las actuaciones de la misma
Luz María Meza que comentó en la conferencia su necesidad de escribir este
texto sobre todo lo qué ocurre con mujeres de edad madura, Enrique Herranz que
también es locutor, María Teresa Garaganza como la mujer joven todos bajo la
dirección de Mauricio Somuano y la escenografía de gran calidad muy sencilla
donde se ve un escritorio, dos sillas, un sofá, una lámpara de pie, una mesita
con ruedas y un mueble para colgar la
ropa y las bolsas.
Aquí en esta obra hay un doble
juego donde nos hablan de la ética de los abogados, y por el otro lado del
tráfico de influencias donde se pierde la línea entre el ser humano y el
abogado en sí.
Qué pasa cuando una de ellas
decide hacer algo para que el hombre tenga que enfrentar a las dos mujeres
donde una de ellas no sabe de su relación con la otra y el triste final del
hombre, en fin como se puso arriba podría pasar por una telenovela de los sesenta
que nos recuerda a Arturo de Córdova, Dolores del Río, Joaquín Pardave aquí a
la pasión le gana la vida.
Una obra llena de emociones, que
nos llevan desde la risa hasta la violencia, que nos llevan del ser humano a
los abogados, de la risa al llanto en fin un trabajo muy bien hecho que se
presenta en el Teatro Benito Juárez por una corta temporada los martes y
miércoles a las 20.00 horas del 5 de febrero al 13 de marzo.
Esta obra se presentó por primera
vez en el Festival Internacional de Teatro de Puerto Monti en Chile, la astucia
de cada uno de los personajes para lograr sus objetivos y la forma como nos va
presentando los hechos, la hacen un melodrama como lo comentaron en la
conferencia.
Con un historial increíble que
empezó con una compañía de teatro El Granero formada en 1999 con la Casa de
Bernarda Alba en los festejos del natalicio de Federico García Lorca.
Ha montado Divorciadas
evangélicas y vegetarianas de Gustavo Ott, la culpa de los hombres, La Cambiale
del matrimonio (coproducción con la Compañía de Cámara Opera Brevis y el
Maestro de Capilla en el Palacio de Bellas Artes y la Orquesta Sinfónica
Nacional.
Este año empieza con puestas de
muy buena calidad lo cual me da mucho gusto, me gustaría que tuvieran
temporadas más largas sin embargo si eso ayuda a que más obras se presenten,
habrá que aprovechar el tiempo para irlas a ver.
Esther Zychlinski
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